Cuando hago sesiones de Coaching el tema que más preocupa o el que cambia la cara de las personas que quieren iniciar un proceso de Coaching es la palabra RESPONSABILIDAD...En ese momento tragan saliva (también en mi momento tragué litros de saliva)...
Me explico mejor: el Coaching es un método de trabajo que supone abrir un proceso de cambio para la persona que lo inicia, y como es obvio, estos cambios implican responsabilidad, hacerse cargo de uno/a mismo/a, asumir nuestras propias decisiones, sus consecuencias, hacernos cargo de nuestra vida, buscar nuestras propias soluciones a los asuntos que nos preocupan o que nos impiden avanzar.... Justamente aquí cuando se explica este extremo es cuando nos echamos para atrás corporalmente hablando y también por dentro...Nos entra miedo, pánico....Y pensamos "¿Yo? ¿Mis soluciones? Pensé que pagaba para que me dijeran que hacer...." Estamos acostumbrados/as a que nos digan qué hacer, cómo y cuándo...Sin embargo está demostrado que esto no funciona. Si yo te digo cómo tienes que dejar de fumar, los pasos, cómo hacerlo, qué técnicas usar... te estoy dando mi solución no la tuya y como tal no va a funcionar del todo porque no parte de tí. ¿Quién mejor que tú conoce tu situación? Somos seres libres, ¿por qué cuando nos invitan a hacer uso de ello nos asustamos? Preferimos que nos digan los pasos a seguir, la solución perfecta para nuestro caso. La dieta de los 10 pasos para adelgazar, la receta mágica para aumentar la autoestima....Pero esto no funciona si no parte de nuestro interior.
Luego está el tema de que pensamos que el de "enfrente" sabe más y mejor que nosotros/as, no confiamos en nuestro poder interno, en nuestras capacidades y fortalezas....y pensamos "¿Cómo voy a saber yo lo que me conviene? Con el lío que tengo....El/la otro/a sabe más que yo para eso ha estudiado, no?" Pues precisamente en esto ayuda el Coaching, en aclarar, ir desmenuzando tus líos, descubrir nuestras fortalezas y capacidades y encontrar nuestras propias recetas, las que parten de nosotros/as. Como véis es un camino trepidante de descubrimiento personal en el que tendremos momentos muy positivos y otros que no lo serán tanto. Pero siempre contaremos con la mano de nuestro coach-guía que apelará a nuestra responsabilidad, capacidad de hacer, de crear y nuestro poder interno.
Responsabilidad es ejercer nuestra libertad, responder por nosotras/os mismas/os, adoptar nuestras propias decisiones y solventar nuestras circunstancias personales de la manera que consideremos más oportuna, siempre haciéndonos cargo de sus consecuencias.
¿No es hermoso hacernos responsables de nuestra propia existencia? Lo que supone no responsabilizar a los demás, no adoptar la posición de víctimas...Somos protagonistas de nuestra vida. No dejemos que nadie viva nuestra vida por nosotras/os.
Por tanto ¿Qué grado de responsabilidad tenemos en nuestra vida?
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