¿Estás preparadx para el cambio?

En este momento que estoy escribiendo quedan apenas 12 horas para el tan esperado 21 de diciembre de 2012.

¿Qué pasará este día? ¿Qué espero que pase? ¿Qué emociones surgen al respecto? ¿Qué me gustaría estar haciendo este día? ¿Qué importancia le doy a este día?

Son preguntas que todos/as  nos hacemos de una manera o de otra. 

Las posturas que podemos adoptar son múltiples, tantas como personas hay en el mundo. Sin embargo, las resumiré en tres y les asignaré un papel o posición ante la vida:

- Pesimistas: Creen que algo malo pasará: el fin del mundo. Lo ven todo negro y no ven la salida.

- Neutras: Creen que nada pasará: siguiendo todo igual.

- Positivas: Creen en un cambio en positivo.

¿Dónde me ubico? (Si es que siento esa necesidad de ubicarme en algún lugar)

Según adoptemos una opción u otra  o ninguna (aunque las he resumido en tres hay tantas como personas hay en el mundo)  nos estará diciendo algo sobre nosotrxs mismxs, es decir, refleja nuestra manera de ser y de estar en el mundo.

¿Cómo estoy en el mundo? Y ¿cómo me gustaría estar?

Estamos en momentos complicados de mucha incertidumbre, crisis y desesperanza. La sensación es de hastío y de necesidad de cambio. Casi todxs estamos de acuerdo en que esta situación que ahora atravesamos es necesaria cambiarla, sensación común de haber llegado a un tope y que ahora viene un cambio. Por tanto, somos muchxs lxs que depositamos las esperanzas e intenciones de cambio en este día. Claro está que creer es crear y si al final somos muchxs lxs que vemos este día como una oportunidad para iniciar un cambio desde la acción, al final así será.

Ahora la pregunta es ¿qué cambio quiero? y ¿qué haré para que este cambio se produzca? ¿qué impacto tendrá en mi entorno?

Esta en nuestras manos el cambio porque somos agentes activxs de nuestra propia vida.